lunes, 7 de diciembre de 2015

La realidad no se compra hecha




Existen varias cosas que no se compran ya hechas. Uno suele comprar las partes, los ingredientes, o lo que corresponda, porque lo interesante consiste en hacerlo uno mismo. Puede ser la maqueta a escala de un barco o un avión, donde se coloca pieza por pieza y luego se pinta. Tal vez un rompecabezas o puzzle, o simplemente una comida para una ocasión especial. 
Lo más importante de semejante lista es la realidad. Todos los días tratarán de vendernos realidades, y es que en estos dias, pareciera que cualquier cosa se vende, se compra, y tiene un precio. La política tratará de vendernos una realidad, solo que una será la oficial, y otra la de la oposición. Los medios venderán otra, coincidente en parte con las anteriores. Hay más alternativas que llegan desde la ficción, sea en series o películas, sólo que la ficción no es inocente, sino que también propone maneras de mirar y juzgar. ¿Quiénes suelen ser casi siempre los "buenos"? ¿De dónde suelen ser?
Hay realidades que se venden porque también hay quienes las compran, quienes están dispuestos a hacerlas suyas. Como hay para todos los gustos, se puede encontrar realidades estables y engañosamente rutinarias, fantasiosas, heroicas, misteriosas, apocalipticas, felices, etc. Por supuesto que no tienen garantias, admitirá el vendedor. Sin embargo, todo el tiempo nuestros mejores especialistas trabajan en la redacción de nuevas realidades y de actualizaciones de las que ya salieron al mercado.
En algunos casos se trata de la remake de versiones tan antiguas como la humanidad, parten básicamente del enfrentamiento entre el bien y el mal, se asigna papeles a cada personaje, y se rellena los detalles con el contexto que corresponda. "Felicidades, eres uno de los nuestros, uno de los buenos. Esos otros son los enemigos".
Una cosa es comprar comida ya hecha, porque no se tenga tiempo o ganas de prepararla. Muy diferente es recibir un programa donde ya han pensado por nosotros, ya han trazado nuestras fortalezas y debilidades y nuestro papel en la historia. Prefiero ir encontrando y poniendo en su lugar las piezas de puzzle, o de diseñar yo mismo otra historia diferente que esa que venga prefabricada. Será porque me gusta lo de ser la oveja negra, o porque como escritor no me gusta un relato mal escrito e inverosímil. La cuestión es que la realidad no la compro hecha.

domingo, 6 de diciembre de 2015

2015: La transición y los heroes anonimos







No se trata de ciencia ficción, me temo. No es una continuación de "2001, Odisea espacial" y de "2010 Odisea 2". Al vivir en la dimensión argentina, donde todo es posible, me resulta a veces difícil explicar el contexto a quienes son de otro países, porque no siempre yo mismo lo entiendo, y ni hablar de encontrarle un sentido. De todas formas, lo intentaré: hace poco hubo elecciones nacionales. De hecho, hemos tenido que votar tres veces en un periodo de tiempo relativamente corto, como si fueran eliminatorias. Cuando solo quedaron dos candidatos, el país entero se dividió de un lado o del otro. Esto no es nuevo, es tan viejo como el propio país, pero esa es otra historia.
Algunos personajes famosos anunciaron que si ganaba quien finalmente ganó, se irían del país. Eso me recuerda a la rana René como sale a veces en memes de Facebook, en este caso hubiera dicho "a veces veo quien ganó y deseo irme a otro país. Luego recuerdo que en otro país no soy famoso y no tendria trabajo, y se me pasa". 
El presidente electo deberia asumir dentro de pocos días. Por lo tanto, tenemos un gobierno en retirada  y otro que todavia no puede hacer nada. Si alguna vez tuviera que explicar lo que es un limbo, ya tendria un ejemplo. Estamos en los dias de la  "transición".


Este fin de semana no he dejado de ver en los medios las discusiones sobre las ceremonias de transición. Que cómo será el bastón de mando hecho para el nuevo presidente, que dónde se realizará cada ceremonia, que si estará o no estará la presidenta saliente para entregarle esos elementos simbólicos-bastón y banda- al presidente electo...por horas y horas no se ha hablado de otra cosa, aparte de las llamadas entre ambos, y las declaraciones en forma de "twits". 
En estos mismos días el precio del boleto de colectivo a aumentado en mi ciudad. Muchos comerciantes han aumentado los precios de sus productos y servicios en todo el país, "por si acaso". La medicina privada aumenta casi cada mes, y si la salud de todos dependiera del Estado, más valdría ir haciendo el testamento. Hay mucho desempleo, y los empleos disponibles suelen ser para "jóvenes de 25 años, con años de experiencia comprobable",o sea, que ya fueran gerentes cuando estaban en la escuela media.
 El consumo de ansiolíticos en el país ha aumentado mas de 100% en los últimos 10 años, como se puede leer siguiendo este link. Comprenderán entonces, que dónde o cómo se realicen las ceremonias, realmente me importa muy poco. Ocurre también que parte de lo que ocurre hoy en dia no pasa tampoco por el Estado, sino por las empresas privadas, algunas de ellas transnacionales y con tanto poder como un país pequeño. Es difícil, sino imposible, saber por dónde pasa realmente el poder, quién lo tiene en determinado momento. 
En esos dias estamos, en que no sabemos qué vendrá. Lo que debemos recordar, es que seguimos siendo los dueños de nuestras propias vidas, y que nuestra sociedad es sostenida por el esfuerzo de muchas voluntades, por personas con vocación, personas que aún tienen valores, héroes anónimos que hacen mucho por sus familias y por la sociedad en la que viven. Incluso algunas de esas personas se habían ido del país, en la comprensible búsqueda de más justas condiciones de trabajo y oportunidades, y sin embargo, regresaron. ¿Por qué alguien iría a un sitio de donde otros quieran salir? La respuesta a esa pregunta suele estar relacionada con el amor en alguna de sus formas, por ejemplo, a una tierra o a una persona. 
Dentro de unos días, todos esos seres muy humanos se adaptarán a los cambios lo mejor posible, con el mismo amor por su tierra que muestran por sus familias. Ojalá que quienes están por venir le hagan la tarea más fácil a los héroes anónimos.